De
una clase cerrada a un aula abierta hay un gran cambio en la concepción de la
enseñanza. En las clases cerradas el o la docente se encuentra segura, entiende
el cuestionario que va a enseñar y puede ir ampliándolo según sus necesidades o
su estimación del tiempo que va a necesitar. Las aulas abiertas se comparten
con el mismo centro, y con otros más lejanos, e incluso de otras culturas. Los
contenidos se pueden compartir e incluso elaborar en común. Claro que esto no
es fácil. No es como hemos aprendido siempre. Es innovar en la educación.
La
Comunidad europea se comprometió hace años en el intercambio del profesorado y
del alumnado con los Programas Sócrates, Comenius o Erasmus para conseguir un
concepto europeo de los ciudadanos. La misma política se ha ido ampliando y ha
ido haciéndose cada vez más popular entre el profesorado y los centros más
innovadores.
Por
otro lado la utilización de las herramientas digitales que ya se pusieron en
práctica durante la pandemia han facilitado enormemente la conexión con
cualquier lugar del continente y el encuentro con otras lenguas y costumbres.
Conocer
una cultura quita el miedo y nos acerca más a la inclusión de todas las
personas. Exige de gestión de tiempo un esfuerzo para crear un equipo en el
centro, pero compensa cuando ves los resultados de interés en el alumnado. Esto
se consigue si participas en una plataforma europea pensada para lograr estos
objetivos: eTwinning
Nuestra
invitada: Inmaculada Haya Martínez, profesora de Audición y Lenguaje en el Ceip
Juan Ramón Jiménez de Tomares.
“eTwinning
es una iniciativa de la Comunidad Económica Europea que se trabaja en una
plataforma o interfaz donde se pretende que la comunicación y la de todos los centros europeos para la
realización de proyectos. Se lanza un proyecto y se busca a la gente; mientras
más antigüedad, más facilidad se tiene para
conectar con alguien. Se trabaja dentro de una plataforma segura. El centro no tiene por qué
tener nada previamente, puede empezar desde cero. Puede haber un profesor que
diga, yo conozco esto (programa europeo) y quiero hacerlo en el centro.
Generalmente se comunica porque hay gente que no lo conoce, cada día estamos
más preparados y se reconoce la palabra eTwinning pero otros todavía no.
Son
propuestas; llegas a un centro y haces propuestas y después el Equipo de Planes
y Proyectos deciden si la propuesta es válida para llevarla a cabo o no.
Yo
era itinerante y tenía muchos problemas para empezar pero una compañera me
animó y entonces le comenté al equipo directivo que había hecho un curso sobre
eTwinning, que me había apuntado en la plataforma y que le iba a llegar
referencias mías del servidor nacional para que aceptaran mi solicitud para
poder empezar a trabajar en el proyecto que yo había visto. El equipo directivo
dio su autorización y yo empecé a trabajar en la plataforma.
Hubo
en el centro un proyecto que ha estado dos años que se llamaba “La cápsula del
tiempo” con el objetivo de trabajar las distintas etapas de la Historia y lo
hicimos con un proyecto eTwinning que se llama Visual thinking que es un
técnica de trabajo para el alumnado buscando la conexión con el tema del
proyecto del centro.
En alguna ocasión yo estaba sola, pero ahora mismo en la plataforma estamos registrados unos catorce compañeros que para mí es mucha satisfacción” I. Haya
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